De Este a Oeste, entre las provincias de Almería y de Granada y a lo largo de 78 kilómetros, Sierra Nevada se eleva hasta alcanzar 37 cimas superiores a los 3.000 metros, incluido el Pico Mulhacén, techo de la Península Ibérica con sus 3.481 metros de altitud. De Norte a Sur, como si se tratase de un inmenso templo gótico, se suceden barrancos y puntales o lomas que se intercalan a modo de accesos y de contrafuertes del macizo, confiriéndole una anchura variable desde los 15 kilómetros de su extremo oriental hasta los 30 kilómetros de su extremo occidental. Tanto por su latitud, a pocos kilómetros de la Costa Tropical granadina, como por su altitud constituye un sistema de alto valor y de gran variedad ecológica. La vegetación varía progresivamente desde los cultivos tropicales de la costa hasta los musgos y los líquenes propios de la flora alpina en los "borreguiles" o pastos de las cumbres, pasando por los bosques caducifolios, los pinos silvestres, los robles, los arces, (etc.) y contrastando fuertemente en frondosidad las umbrosas vertientes septentrionales y las vertientes meridionales, que descienden hacia el Mediterráneo.
En el mes de mayo, las cotas más altas de la parte central del parque comienzan a perder el manto níveo, recobrando temporalmente el color de las "lastras", las pizarras metamórficas que predominan en el paisaje. Así quedan al descubierto las abundantes lagunas y cabeceras de los ríos principales, como la de Aguas Verdes (3.050 m), por debajo de los Vasares del Pico Veleta (3.428 m) en la vertiente alpujarreña. Hasta las primeras nevadas de octubre estas lagunas, junto con los ríos, los torrentes y los ventisqueros, cada vez más escasos, ofrecen el soporte necesario para la vida de las especies animales que habitan la alta montaña, como por ejemplo el acentor alpino, la cabra montés o el zorro. Asimismo florecen más de 2.000 especies vegetales, incluyendo endemismos ibéricos, regionales y locales, como el diente de león, la dedalera, la violeta de Sierra Nevada, el alfilerillo (también llamado "reloj") de Sierra Nevada o la genciana alpina.
Sierra Nevada -el Mons Solaris de los antiguos romanos, Yabal Sulayr para los musulmanes- fue declarada por la UNESCO Reserva de la Biosfera en 1.986 y Parque Nacional por el Estado español en 1.999.
En el mes de mayo, las cotas más altas de la parte central del parque comienzan a perder el manto níveo, recobrando temporalmente el color de las "lastras", las pizarras metamórficas que predominan en el paisaje. Así quedan al descubierto las abundantes lagunas y cabeceras de los ríos principales, como la de Aguas Verdes (3.050 m), por debajo de los Vasares del Pico Veleta (3.428 m) en la vertiente alpujarreña. Hasta las primeras nevadas de octubre estas lagunas, junto con los ríos, los torrentes y los ventisqueros, cada vez más escasos, ofrecen el soporte necesario para la vida de las especies animales que habitan la alta montaña, como por ejemplo el acentor alpino, la cabra montés o el zorro. Asimismo florecen más de 2.000 especies vegetales, incluyendo endemismos ibéricos, regionales y locales, como el diente de león, la dedalera, la violeta de Sierra Nevada, el alfilerillo (también llamado "reloj") de Sierra Nevada o la genciana alpina.
Sierra Nevada -el Mons Solaris de los antiguos romanos, Yabal Sulayr para los musulmanes- fue declarada por la UNESCO Reserva de la Biosfera en 1.986 y Parque Nacional por el Estado español en 1.999.
Enhorabuena por el blog, una maravilla. Se nota la combinación de buena fotografía y admiración por el medio natural.
ResponderEliminarAlfredo